Las paredes en bruto tienen su origen en el brutalismo, movimiento arquitectónico que nace en los años 50 y 60 que buscaban crear edificios que destacaran por su estructura y materiales de construcción en lugar de ser ocultados por acabados decorativos.
En la reforma de este apartamento en Madrid optamos por esta tendencia de decoración en las paredes del salón, para crear un ambiente más natural e integro del espacio.